Ahora que las horas pasan lentas
Recuerdo el dulce aroma de tu piel,
Tú mano enlazándose en mi mano,
Recuerdos tan amargos como hiel.
Ahora que las horas van a tientas
La mente se convierte en ser infiel,
Amigo traicionero e inhumano
Que pinta pensamientos con pincel.
Ahora que las horas ya terminan
Termina mi dolor, arduo y cruel,
Y este gran pesar que yo emano
Será mi despedida para él.
Ahora que ya acaban las tormentas
Prometo siempre amarme y serme fiel,
Y mente y corazón ahora hermano
Y digo, para siempre, adiós a aquel…
A aquel que me rozaba dulcemente,
A aquel que me besaba sin cuartel,
Adiós, sí, me despido de antemano,
Al fin rompí mis sueños con cincel…
